Hoy fue el día de Cádiz. Llegar hasta la ciudad implicó cruzar el nuevo puente que es una verdadera obra maestra. Es un puente atirantado que consta de 176 tirantes, inaugurado en el 2015.
Tiene una longitud de 3km, una anchura de casi 37 metros y una altura total de 185 m, siendo la distancia que separa el tablero del agua de 69 metros, convirtiéndose en el puente con mayor gálibo vertical de Europa y el segundo del planeta (1).
Imponente.
La primera parada fue la playa de la Caleta, pegadita al centro histórico. Una costa al estilo marplatense, con su rambla. La marea baja con los botes encallados nos dieron la impresión de que estábamos frente a un cementerio de barcos (2-5).
Aprovechamos la parada para almorzar unos sándwiches de carne mechada y queso.
Luego nos adentramos un poco por el barrio La Viña y retomamos la caminata por la Av. Campo del Sur que costea esta isla (6-8)
Parada obligada en la Catedral de Cádiz donde L y B entraron (9-13). Con Clarita nos quedamos en la puerta escuchando a 2 pibes tocando la guitarra. Pucho en la boca, lata de cerveza a un costado y una inscripción en la guitarra que decía "darle caña". El flamenco puede gustar o no, pero la velocidad de los dedos es impresionante. Dominio total del instrumento en cada nota.(14)
Me llamó la atención como una señora mayor se acercó a uno de los dos. Tras preguntarle cómo se llamaba, le dio un beso y le dio las gracias. El guitarrista devolvió el gesto con un beso en la mano y la señora se fue contenta y emocionada.
Claramente la música transmite e inspira cosas que sobrepasan cualquier pandemia.
Para terminar el día, cruzamos del otro lado y nos alejamos un poco para conocer la Playa de Redes. La misma se encuentra en una zona bastante residencial, al estilo Miami (15). Con calles amplias, grandes casas y palmeras. La playa es muy bonita. Amplia, cómoda, con poca gente y una temperatura agradable (más caliente que todas las de Portugal :) ). (16-17)
Tiene una longitud de 3km, una anchura de casi 37 metros y una altura total de 185 m, siendo la distancia que separa el tablero del agua de 69 metros, convirtiéndose en el puente con mayor gálibo vertical de Europa y el segundo del planeta (1).
Imponente.
La primera parada fue la playa de la Caleta, pegadita al centro histórico. Una costa al estilo marplatense, con su rambla. La marea baja con los botes encallados nos dieron la impresión de que estábamos frente a un cementerio de barcos (2-5).
Aprovechamos la parada para almorzar unos sándwiches de carne mechada y queso.
Luego nos adentramos un poco por el barrio La Viña y retomamos la caminata por la Av. Campo del Sur que costea esta isla (6-8)
Parada obligada en la Catedral de Cádiz donde L y B entraron (9-13). Con Clarita nos quedamos en la puerta escuchando a 2 pibes tocando la guitarra. Pucho en la boca, lata de cerveza a un costado y una inscripción en la guitarra que decía "darle caña". El flamenco puede gustar o no, pero la velocidad de los dedos es impresionante. Dominio total del instrumento en cada nota.(14)
Me llamó la atención como una señora mayor se acercó a uno de los dos. Tras preguntarle cómo se llamaba, le dio un beso y le dio las gracias. El guitarrista devolvió el gesto con un beso en la mano y la señora se fue contenta y emocionada.
Claramente la música transmite e inspira cosas que sobrepasan cualquier pandemia.
Para terminar el día, cruzamos del otro lado y nos alejamos un poco para conocer la Playa de Redes. La misma se encuentra en una zona bastante residencial, al estilo Miami (15). Con calles amplias, grandes casas y palmeras. La playa es muy bonita. Amplia, cómoda, con poca gente y una temperatura agradable (más caliente que todas las de Portugal :) ). (16-17)
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