by G
Por suerte nuestro ultimo día en Roma nos despertó a
diferencia de lo q prometía el pronostico, sin lluvia.
Desayunamos, apretujamos
las valijas y salimos corriendo a dar la última vuelta. Pasamos por la iglesia Santa
Maria de Angeli (ver foto 1) y
en la Plaza España nos juntamos con nuestra guía
Marta xa hacer el free walking tour (ver foto 2).
Aprendimos que las 4 iglesias mas grandes de Roma son San
Pierto, San Pablo, San Juan y Santa María Maggiore.
Pasamos por la columna de Marco Aurelio de 2000 años, que
tras caer el imperio romano, los papas cambiaron la estatua del emperador x la
de un santo. Esto no fue un caso aislado, sino fue lo que hicieron en la
mayoría de los monumentos paganos.
El Panteón es otro ejemplo (ver foto 3). Tiene 2000 años, y
su nombre viene de “pantheos”, o sea todos los dioses. En el 1000 lo
convirtieron en una iglesia. Dentro se encuentra la tumba de Victorio Manuel 2,
primer rey de la Italia unificada.
También esta la tumba de Rafael (ojo, no es
el de las tortugas ninjas).
Una de las particularidades de este monumento es
que es el único con un domo con la cúpula abierta. Cuando llueve entra agua,
pero el sistema de drenaje que hicieron los romanos en su momento hoy sigue
funcionando y no se inunda como BsAs.
Pasamos por la Piaza Novona (ver foto 4), por el Castel de
Sant Angelo (originalmente el mausoleo de Adriano) y terminamos el tour en la Piaza
San Pietro... en el vaticano (ver foto 5).
Luego del recorrido, salimos para el hotel, agarramos las
mochilas y nos tomamos el Terravision de las 15.30 que nos dejara a las 16:10
en el aeropuerto.
El vuelo 1141 con destino a la ciudad de BsAs salía a las
19.35, por lo que teníamos tiempo de sobra. Del otro lado nos estaba esperando
la familia, un desayuno argento y un asado dominguero.
Al llegar, una larga cola para hacer el check in en
Aerolíneas nos hizo sentir con un pie ya en casa. Pintaba que el vuelo iba a
ser duro, lleno, lleno.
Cuando llegó nuestro turno, le pedimos a la tana que nos
atendió una ventanilla… y HABIA! Estábamos de suerte. Por lo menos íbamos a
pasar las casi 14 horas de vuelo un poquito mas cómodos.
Encintó la primer valija, pero al momento de despachar la
segunda algo ocurría, algo no le gustaba. Momento dice la tana mirándola a L, “vos
no sos Andrea Romero”. Claramente no. Algo pasaba. Nos pide el numero de
reserva, se los damos. Discute algo con un compañero… algo no le cerraba. Hasta
que en ese instante la señorita pronuncia unas palabras que quedarían resonando
en mi cabeza por un rato largo. “…per cuesto volo e domani” WTF!?
Cómo que “domani”? Ahí fue cuando nos explicó que nuestra
reserva era para el 21. Si si.. para el 21, pero hoy es sábado 20!
Creo que nadie hubiera querido estar en mis zapatos en ese instante. L se puso como
loca, histérica, un fuego.
Que “yo te dije”, que “cómo puede ser”, “sos un
boludo”, y otro tipo de frases mas elevadas de tono que no puedo llegar a reproducir…
Maldito aeropuerto, era la segunda vez que estábamos
ahí y no podíamos viajar. Antes llegamos 1 hora tarde, ahora habíamos llegado 1
día antes. Pero bue, esta vez era mi culpa. Y L me lo recordó TODO EL RESTO DEL
DÍA.
Eran las 16, seguíamos en el aeropuerto, sin vuelo,
sin hotel, sin internet…otra vez Roma Fumicino en tarlipes.
Lo primero que se nos ocurrió fue llamarlo a Marco. Moneda,
teléfono público, atiende Marco y nos dice que lo llamemos en 1 hora. Moneda,
máquina de internet y vimos en booking algunos precios. Lo mas barato era uno
de 50 euros la noche…
A la hora, moneda, llamamos a Marcos, apagado, nos
traga el crédito. A los 5 min, otra vez… moneda, llamamos a Marcos, apagado,
nos traga el crédito. A ese punto ya nos quedamos sin monedas y tanto la
máquina de internet como el teléfono público usaban monedas.
Qué hacemos? Por suerte, fuera del aeropuerto había
una maquinola que te da cambio… Conseguimos, pagamos por internet y terminamos
sacando por booking el hotel de 50 que si bien estaba medio alejado, nos
servía.
Oooootra vez el Terravision a Roma Términi, metro y finalmente
llagamos al hotel.
Después de toda esta vuelta, ya eran como las 21 y la
cara de L no cambiaba. Había que remar la situación, pero nada parecía
funcionar… “Otra vez en esta ciudad de mierda! Me quiero ir”, no dejaba de
repetir…
Que bárbaro… le regalo una noche mas en Roma y así me
trata… jajajaja
Para terminar la noche, fuimos a comer a un bodegón
cercano al hotel, pero la cara de L no cambió (ver foto 6).
Comimos medio pelo, no nos salió barato, pero al
menos nos tomamos una botellita de vino y nos fuimos a dormir.
Al menos en este viaje tuvimos varias historias que
contar.
Algunas reflexiones:
- El que hace se equivoca
- El que las hace las paga
- No hay nada peor que una mujer histérica, con motivos.
- No hay 2 sin 3! Perdimos un vuelo por llegar tarde, quedamos varados en Riga (Letonia), y fuimos al pedo hasta el aeropuerto 1 día antes.
- Si vas a lavar calzones, no le pijotees y lavá 1 de mas por las dudas. Nunca sabes cuándo lo vas a tener que usar.
- No esta bueno usar el mismo calzón 2 días seguidos.
- Si tenes una remera verde y la usas muchos días, no la archives tan al fondo. No sabes cuando puede pasar de ser la prenda mas sucia a la menos sucia.
Lu indignada, parte 1:
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Lu indignada, parte 2:
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Mi defensa sobre lo ocurrido con el aéreo de Roma:
Nota: Guille, tengo a Amelia como testigo de este acontecimiento! En mi cabeza (y en el itinerario) estaba llegar el Domingo, descansar e ir a trabajar el Lunes fresquito. Si me ves como un zombie, ya sabes x q es.
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