By G
Nos levantamos temprano. A las 5.00 estaba
sonando el despertador. Teníamos un largo viaje en ferry por delante a la isla
de Santorini.
De todas maneras, en esta oportunidad
teníamos la segunda alarma de la recepción. A las 5.30 nos llamaron, Lu atendió
y no sabe si le dijeron "god bless you" o "I miss you" :S
Al menos había buenas noticias de baires.
Había ganado el calamar 1-0 en Vicente Lopez y se volvía a meter en el
reducido.
Armando la valija dude si prender fuego la remera verde, pero finalmente
no lo hice.
Qué buenos lectores que son, hace 4 días
que le tenía puesta y nadie me dijo nada…
A las 6.15 ya estábamos en el puerto de
Pireaus. Solo necesitamos 15 maravillosos minutos para tomar el metro verde
desde Monastiraki. Al llegar vimos el ferry, era ENORME.
Nos sorprendió como
entraban varios camiones con acoplado! (ver foto 1). Por dentro, era como un
gran hotel flotante, un verdadero edificio.
Estaba tranquilo cuando entramos,
hasta que… otra vez se abrió la tranquera y empezaron a aparecer chinos por
doquier… gritando… Por dios!
Por suerte nos cruzamos con los chicos
argentinos q habían tenido la misma problema q nosotros con el vuelo de
EasyJet, Juan y Josefina.
Con ellos las 8 horas se pasaron rápido y las 15 y
monedas estábamos llegando a la isla.
Ah, para comer nos castigaron un poco, pero
había que hacerlo… las barritas de cereales no alcanzaron. (ver foto 2)
Para recorrerla optamos alquilar un auto,
un Fíat Panda, que es como una gran caja de zapatos amarilla... muy parecido al
UNO nuevo.
Si alguien lo tiene o se lo piensa comprar, que sepa que para mi es
una caja de zapatos…
Con el auto fuimos en búsqueda de nuestro
cheap hotel. No estaba para nada mal, muy lindo y todo recién pintadito (ver
foto 3). Lo único es que estaba en la punta de la isla, pero con el auto no fue
tan terrible.
Dejamos la cosas y salimos a recorrer la
isla antes de que caiga el sol. Los caminos son sinuosos… curva… contracurva…
arriba… abajo… En fin, después de dar varias vueltas, terminamos en Fira, que
es la capital de la isla.
Nos pareció muy linda y pintoresca (ver
foto 4), callejuelas empedradas, llena de negocios, laberintos donde da gusto
perderse(ver foto 5). A eso de las 21, comimos uno gyros de pita y un chicken
pita, con una cerveza fix al paso y nos volvimos a dormir .
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